A medida que envejecemos, los efectos de la gravedad, la exposición al sol, y el stress de la vida diaria, dejan sus rastros en nuestras caras. Aparecen entonces surcos profundos entre la nariz y la mejilla; el óvalo de la cara pierde definición en la porción mandibular; los pliegues de la piel y nuevos depósitos de tejido adiposo surgen en el cuello.

El lifting facial o ritidectomía puede devolver el aspecto descansado y agradable que teníamos previamente. Este procedimiento se realiza por medio de pequeñas incisiones en el cuero cabelludo y pliegues naturales de su rostro.
El Lífting endoscópico es un ejemplo de la evolución tecnológica aplicada a la cirugía estética, permitiendo éste tipo de procedimientos a través de mínimas incisiones para lograr una mejor calidad en las cicatrices y en la recuperación del paciente.